Carta a la soledad
«Soledad:
No sé si decirte querida, no sé... Creo que siempre te he apreciado como una amiga, porque siempre me fuiste muy útil y estuviste presente en los momentos más difíciles de mi vida, en los que necesité pensar, reflexionar, en los momentos en los que necesité silencio... Pero también siento que te has enamorado de mí, has pasado quizá más tiempo de lo debido conmigo. Quizá otras personas te necesiten más que yo. Aunque no lo voy a negar: eres imprescindible... Otros habrán requerido tu presencia, otros te habrán llamado con locura, otros te habrán deseado desesperadamente, pero tú te has quedado conmigo la mayor parte de mi tiempo.
En muchas ocasiones he sentido miedo a tu lado, en muchas ocasiones he llorado porque no me dejabas en paz, en muchas ocasiones me has roto el corazón... Pero sé, Soledad, que me has ayudado siempre, sé que cada momento que estuviste conmigo no ha sido en vano, sé que he madurado gracias a ti, entendiendo que no siempre estaré rodeado de gente, sé que me he ahogado en mis pensamientos muchísimas veces, sé que me has hecho filosofar más de lo debido. Sé, Soledad, que en momentos quizá inoportunos, has aparecido... A pesar de todo, sé Soledad, que te he sido fiel; he sido un leal compañero y tú me has demostrado lo mismo, sé que has estado también cuando te necesité, sé que te he tratado mal, sé que me has tratado mal tú también, pero sé que he aprendido a quererte después de todo...
Muchos han gritado tu nombre enojados, muchos han repetido tu nombre una y otra vez necesitando tu presencia, muchos han estado esperándote, muchos de verdad, quizá te echen de menos, pero también muchos te han maldecido. No todos te quieren, no todos tienen ganas de compartir su tiempo contigo.
Por eso, Soledad, como amigo te doy mi consejo: tienes que estar siempre presente en donde te necesiten, pero no abrumes, no asustes, eso no hace falta.
Saludos». (Anónimo)
Fragmento del libro “¡YO, SÍ QUIERO LLEVARME BIEN...! Guía para alcanzar satisfacción personal al relacionarnos”, (Ma Pilar Berzos, MaPaz Rinconada) Editorial Colección Dynamis
Comments